Independiente le ganaba a Argentinos Juniors 1-0 y las chances de meterse en la próxima Copa Libertadores estaban más vivas que nunca, pero a dos minutos del final apareció Gonzalo Prósperi y, de cabeza, puso la igualdad que dejó al equipo de Américo Gallego sin nada.
Más allá de haber estado muy cerca de conseguir el triunfo, el Rojo jugó uno de sus peores partidos del torneo. Inconexo, desconcentrado, sin profundidad, sin ideas, el team del Tolo no repitió lo que venía haciendo y se complicó en demasía con el conjunto de Claudio Borghi, que tuvo una opaca y timorata labor.
De arranque, en la primera jugada, Argentinos casi se pone en ventaja, pero Adrián Gabbarini le tapó bien un mano a mano a Gabriel Hauche. El Rojo respondió recién a los 37, cuando Nicolás Peric sacó de manera increíble una palomita de Andrés Silvera tras una buena acción de Patricio Rodríguez.
El resto de la etapa inicial fue pobrísimo. Argentinos casi no generó juego, salvo cuando la tuvo Néstor Ortigoza en sus pies, e Independiente estuvo demasiado impreciso y desconcentrado: Mareque no atacó, Matheu y Galeano erraron varias, Tuzzio también, Busse hacía una bien y dos mal, lo mismo que Patricio Rodríguez, y a Gómez y Gandín no les salía una.
En el complemento el equipo de Gallego mejoró la imagen y se plantó en campo de Argentinos, aunque sin encontrar los caminos del gol. Así, recién pudo inquietar a los 16 con un remate de Gandín dentro del área, tras una serie de rebotes, que Peric nuevamente resolvió bien y envió al corner.
El partido parecía un irremediable empate, pero a 9 minutos del final, Gómez desbordó, Peric la tocó antes de que Silvera llegara a cabecear y Gandín, que no había tenido una buena noche, definió esquinado y puso el 1-0 que parecía sellar la victoria roja. Parecía…
A nada del final, a los 44 y monedas, Sergio Vittor, recién ingresado, cometió una falta cerca del área, la pelota llegó bombeada cerca del arco de Gabbarini y Prósperi, que le ganó en el salto a Acevedo, de los mejores del Rojo, mandó la pelota al fondo de la red de cabeza y ahí sí le puso cifras definitivas al encuentro, 1-1.
Con este resultado, Independiente oficial y matemáticamente ya no tiene chances de ser campeón (igualmente era algo muy improbable) y también dejó pasar la chance de quedar a una unidad de Newell’s en la lucha por la Copa Libertadores. Una lástima.
Saludos, Smooth Criminal